Acción en El Museo de la Ciudad, el espejo mágico de Gallardón

(JPG) Un grupo de unas 70 personas ha entrado en el Museo de la Ciudad, situado en la calle Príncipe de Vergara 140, donde han repartido octavillas para denunciar las "deficiencias y carencias" que se sufren en la ciudad de Madrid.

La acción está enmarcada dentro del eje de Ciudad, Urbanismo y Espacios Sociales de la Semana de Lucha social, y se ha desarrollado sin ningún tipo de incidentes. Los ocupantes, que ya han abandonado el museo, entonaron diversos cánticos y han pegado carteles de las jornadas. Tal y como explican en el comunicado, en este tipo de museos los poderes públicos ofrecen aquella cara de la ciudad que resulta más cómoda y menos conflictiva, un espejo que refleja el aspecto más agraciado de la realidad social.

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COMUNICADO

odo museo tiene como prioridad producir un sentido sobre lo que resulta culturalmente signficante y lo que no, valorizando lo primero y obviando lo segundo al no reconocerlo estamento de cultura. La construcción de un orden cultural mediante un proceso de criba, de selección, de distinción en el doble sentido de la palabra, distinguir y ensalzamiento.

Preguntarse sobre el sentido que produce EL MUSEO DE LA CIUDAD es algo complejo, pero no engañamos al afirmar que lo que prioritariamente genera es una imagen de la ciudad, una visión, una forma de presentarse a sí misma en público. Esta mirada ilumina determinadas políticas urbanas, determinadas figuras arquitectónicas y determinados sujetos que son los protagonistas y responsables de haber construido este Madrid.

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Hoy irrumpimos en este espacio porque somos la parte invisible de esta ciudad, el Madrid que denuncia sus insostenibilidad ecológica, los habitantes de barrios con carencias de equipamientos y políticas sociales, la gente sin vivienda, ciclistas sin carril-bici, peatones matratados por el automovil... representamos todo aquello que este museo expulsa y rechaza. En definitiva, venimos a pasar un rato en este museo, a dejarnos ver en este simbólico espacio y de paso visibilizar las deficiencias y carencias que sufrimos cotidianamente en esta ciudad que habitamos, una denuncia en vivo de la versión oficial de Madrid.

No nos quedamos para ser contemplad@s como objetos de una exposición alternativa del MUSEO DE LA CIUDAD, marchamos de nuevo a la ciudad que creamos y somos a pesar de este museo, y de otros muchos pesares.

ROMPAMOS EL SILENCIO!!